La peli del viernes: Airdoll (Kûki ningyô) de Hirozaku Kore-Eda

Con el sol que llega para hacer desaparecer el temporal de la semana vamos este viernes con una peli diferente, de uno de los autores japoneses más eclécticos de los últimos años. Kore-Eda y su obra del 2009 Kûki ningyô o cómos e ha traducido «overseas» «Airdoll».

La historia comienza con una muñeca hinchable de tamaño natural vive en un modesto piso de Tokyo. No habla ni se mueve. Pero es la única compañera de su amo, un hombre de mediana edad. Él le habla, la baña y le hace el amor cada día cuando vuelve del trabajo.

La rutina diaria se rompe cuando la fantasía se hace realidad. De pronto, cobra vida y tiene alma. Acaba de nacer y no entiende lo que ocurre a su alrededor, aunque se da cuenta de que existe un mundo esperando a ser explorado más allá de las paredes del piso. Con el tiempo se atreve a salir al mundo exterior, se siente fascinada por todo lo que ve. Conoce a muchas personas de todo tipo, pero ninguna es capaz de explicarle lo que significa “estar vivo”.

Un día, entra en un videoclub y su mundo cambia para siempre. Conoce a Junichi, el vendedor, del que se enamora inmediatamente. Decide trabajar en la tienda, y la pareja se une más con cada día que pasa. Van al cine, recorren la ciudad juntos, como dos novios. Todo es maravilloso para la muñeca hasta que se corta la mano accidentalmente y empieza a deshincharse delante de Junichi…

Air Doll busca ese realismo mágico y nos hace buscar el alma de las cosas, como ya ocurría con Pinocho en este caso es un personaje de aire y pvc el que un buen día y por una especie de hechizo toma conciencia de sí misma y comienza una doble vida: por el día, trabaja en un videoclub y aprende a comportarse como una humana; por las noches, vuelve a ser el pasivo juguete con el que su dueño disimula el dolor de una pérdida.

Ansiando ser una humana más, sufriendo a causa de este nuevo estado…en constante búsqueda y aprendizaje.

Air Doll oscila entre lo intelectual y lo directamente delirante, plasma ideas que rebasan la mera soledad y la deshumanización, enfrentándonos a lo horrible de la aceptación de ambas cosas en algunos momentos de nuestra vida.

Habla de la soledad y de cómo intentamos ir consiguiendo pequeñas porciones de felicidad.

Kore-eda es un gran retratista de la ansiedad y el dolor ante la ausencia, la inminente llegada de la muerte, la desubicación social y todos los deterioros que provoca el aislamiento y las diversas sociopatías.

En Airdoll trata de ser mucho más práctico, mucho más lúdico y también esencialmente paranoico, cuestionándose en todo momento el porqué de las desviaciones que se narran.

La peli, en definitiva es hermosa, quizás un poco larga de más, y un poco lenta en la parte final pero definitivamente “Air doll” marca un punto y seguido en la revisión de la existencia humana desde las partes más absurdas a los interiores más profundos.

Os dejo el trailer:

Para mí tiene momentos realmente especiales y brillantes, las conversaciones metafóricas con el anciano del parque son sencillamente maravillosas!

Si os gusta el realismo mágico y la metáfora absoluta os gustará!

Que paséis buen finde!

じゃまたね!!!

Ja, mata ne!!!

(Hasta pronto!)